distribuyen Biblias y publicaciones cristianas en 235 países. La Atalaya, revista de enseñanza bíblica, comenzó con una tirada mensual de 6.000 ejemplares en un solo idioma. Ahora se imprimen más de veinticuatro millones de ejemplares quincenalmente en 146 idiomas. A fin de organizar la obra mundial de educación bíblica, los Testigos han construido o adquirido centros administrativos en 110 países. Además, han edificado miles de lugares de reunión y grandes Salones de Asambleas donde todas las personas interesadas puedan recibir más instrucción bíblica.
Y puede que usted se pregunte: ¿de dónde sacan el dinero los testigos de Jehová? ¿Cómo producen millones de revistas (y libros y biblias) cada quince días? ¿Cómo construyen edificios, salones de asambleas y de reunión por miles?
Y eso sin mencionar que no piden el diezmo (como las iglesias evangélicas y los mormones), que no pasan la charola en cada reunión (como la iglesia católica y otras) y que no piden dinero a través de predicadores sensasionalistas en televisión.
De veras, ¿cómo lo hacen los testigos de Jehová? Usan el sistema de donaciones voluntarias. El que desee donar puede hacerlo depositando en una cajita de donativos. Eso, añadido a que no tienen que mantener a sus líderes, son autosuficientes (ellos mismos contruyen, mantienen y limpian sus salones del reino y de asambleas) y tienen una estructura de ayuda internacional.
Tal vez a muchos les parezca increíble, pero eso es lo que se esperaría de una organización que diga estar dirigida por el espíritu santo de Dios.
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| Salón de Asambleas de Acapulco |
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| Salón del Reino en Coahuila |
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| Sucursal de México |
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